La primera Ciudad Discoteca que triunfa y provoca la difusión del género local discoteca, nace de la crisis de una ciudad restaurante. Esto sucedió en 1959 en el restaurante-salón de baile llamado ''Scotch Club'' de Aquisgrán en Alemania.El dueño decidió suprimir todo el sistema de restaurante y convertirlo en una ciudad más productiva.Se suprime la orquesta de música en vivo poniendo en su lugar música “enlatada” que, en realidad, no era una medida para dotar de tecnología al local, sino para suprimir gastos. De esta forma, surge el Jockey Tanz Bar, que no era más que el antiguo Scotch Club rebautizado.En la inauguración, la clientela, acostumbrada a escuchar música en vivo, se mostraba aburrida. Sin embargo, entre los presentes se encontraba un joven periodista local que cubría el evento, y que aceptó el reto de animar al público. Su nombre era Klaus Quirini y en aquellos momentos tenía sólo 18 años. Su propuesta era una música diferente: ejerciendo casi como presentador de radio y combinando de forma rápida y aleatoria distintas canciones, consiguió animar al público convirtiéndose en un personaje cercano al DJ de la actualidad, lo que incluyó cambiarse el nombre por DJ Heinrich. No obstante, hay que comentar que el cambio de nombre no se debía a que parecía un nombre más espectacular o bonito, sino todo lo contrario: su profesión estaba en cierto modo mal vista entre la sociedad, de modo que cambiando el nombre, el apellido de la familia no se veía vinculado al ambiente del Jockey Tanz Bar. Es este dato lo que nos confirma que la ciudad discoteca surge como un local mal visto entre la sociedad.El DJ cobraba un papel fundamental en esta primitiva discoteca, siendo el reclamo y el agitador de masas que hizo que el local tuviese afluencia de clientes.Sin embargo, a pesar del tipo de clientela, seguían habiendo estrictos códigos de vestimenta: los hombres con chaqueta y corbata, y no se dejaba entrar a las mujeres que vistieran pantalones.El Jockey Tanz Bar continuó abierto hasta 1992.El auge del Jockey Tanz Bar tuvo eco en Alemania y se empezó a exportar a otros países. No tardaron en abrirse locales de este tipo en Inglaterra y Francia, pero fue en Estados Unidos, sobre todo en Nueva York, en donde encontraron un terreno fértil y una mayor acogida por el hecho de que se necesitaban nuevos mercados de relación para dar cabida a la pluralidad de culturas existente.La nueva forma de diversión nocturna, traída por los soldados que volvían a casa después de servir en las bases militares en Alemania, y por los emigrantes que llegaban al país con ánimo emprendedor, empezó a desarrollar una nueva tipología de local de ocio en Estados Unidos. Una de los primeros fue Le Club, en Nueva York, que abrió en 1960 propiedad de un inmigrante francés. El nombre hacía referencia a que había que ser miembro para entrar, o en su defecto, estar acompañado por un socio. Esto indica que ya no está mal visto asistir a estos locales.Otro establecimiento famoso que se desarrolla en estos momentos es el Peppermint Lounge (1958-1965), en este local se escuchaba música rock, famosos acudían a bailar y beber, pero la principal atracción que introdujo fue los go gos, chicas vestidas en vaqueros que bailaban sobre la barra y la tarima. Luego, surgen los bailarines gogos, chicos que se dedicaban a hacer piruetas sobre la pista de baile. Es en este momento, aparecen como elemento de atracción los bailarines, que se convertirán en un personaje característico de la discoteca.De forma paralela al desarrollo de estos clubes, se desarrolla también un tipo de música que va a ser decisivo en la evolución de la ciudad discoteca. Es una música calificada como “underground” que es producida principalmente por la población afro-americana y el colectivo gay. Esta música mezcla ritmos y sonidos del funk, del soul y genera lo que se va a calificar como música “disco”, término que procede del vocablo “discotheque”, que surgía en Francia. Sin embargo, el paso del soul y el funk a la música disco, no sólo implicó a colectivos marginales, sino también a artistas como Barry White. Fue el tema de Jerry Butler, Only the Strong Survive (1969), el primer ejemplo de combinación de los elementos que definirían la música disco. En 1975, éxitos como “Never can say Goodbye” de Gloria Gaynor y “Love to love you baby” de Donna Summer acabaron por consolidar la primacía del sonido discoteca. Hubo otros muchos temas de gran éxito a nivel mundial, pero fueron los Bee Gees quienes pusieron cara a este tipo de música, e incluyeron temas en la banda sonora del film “Fiebre del sábado noche”, la cual batió todos los récords cinematográficos y musicales. Tras la onda expansiva de la “fiebre” saltaron todos los intérpretes del mundo, desde el británico Rod Stewart, a los Beach Boys, Earth, Wind & Fire, Boney M., Elton John y muchos nombres más.Los primeros locales en los que comenzó a escucharse esta música eran frecuentados principalmente por los colectivos gays, es el caso del Paradise Garage. No obstante, lo que comenzó como un fenómeno “undeground”, se popularizó a través del cine con la película citada anteriormente, llegando a constituir el estilo musical de Studio 54 y de las discotecas del momento. Los jóvenes, que hasta entonces habían estado relacionándose en guateques, fiestas privadas en viviendas, acuden a las discotecas en busca de estos nuevos ritmos movidos y ruidosos que son mucho más complicados de bailar en casa.
viernes, 29 de noviembre de 2013
LA PRIMERA DISCOTECA DEL MUNDO
Una discoteca es un local público con horario preferentemente nocturno para escuchar música grabada, bailar y consumir bebidas. También se conoce como night club, boîte, disco, etc. Generalmente, en una discoteca sólo se expenden bebidas (alcohólicas o no), aunque en algunas también sirven comidas. Por ejemplo, en Barcelona se hicieron famosos los bocadillos de jamón york y queso en pan de molde que se servían en la discoteca Bikini, hasta el punto que la palabra biquini ha quedado en el habla coloquial catalana para designar ese tipo de emparedado, y no solo en la ciudad de origen.
http://bikinibcn.com/bikini/
Durante la segunda Guerra Mundial surgieron locales de forma clandestina en Francia a los que la gente acudía a escuchar y bailar música grabada. Uno de los locales más frecuentados se llamaba “La discothèque”, y a él se debe el nombre con el que hoy se conoce a nuestra ciudad. Este tipo de local terminó por extinguirse, pero dejó un precedente de nombre y funcionamiento. Una de las causas por las que consideramos que no funcionó este tipo de lugar como discoteca fue a consecuencia de la crisis que padecía la ciudad en la que se asentaba, lo cual remarca la dependencia de la misma.
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